La fusión hospitalaria que ha conllevado el cierre de Traumatología y el antiguo Clínico, ha dejado a los vecinos de la zona Beiro y Norte de Granada sin sus hospitales de referencia. El descontento que empieza a acumularse en los distintos vecindarios ha llevado a que en octubre se celebre una multitudinaria manifestación para que la Administración Autonómica revierta los perjuicios sociales y económicos que ha tenido en estas comunidades vecinales la decisión de centralizar los servicios sanitarios en la Ronda Sur. La convocatoria fijada para el 16 de octubre, saldrá a las 12 de la mañana desde el antiguo hospital Clínico y ya son muchas las adhesiones que se están recibiendo.
Por su parte, la situación de las familias del barrio de Albayda es ahora más complicada. Sin conexión directa con el PTS, los vecinos de la Avenida de Federico García y la Estación de Autobuses, han visto desaparecer las ventajas y comodidades de vivir cerca de estas infraestructuras sanitarias. Esta situación ha generado un amplio malestar entre las familias de la zona, pues a la lejanía y desorganización de las nuevas instalaciones se une el hecho de que no hay una conexión directa entre la Avenida Federico García Lorca, la Estación de Autobuses y el PTS, lo que obliga al vecindario, entre los que hay pacientes crónicos que deben acudiar a diario al hospital, a realizar un trayecto de una hora en autobús con trasbordo incluido para acudir al nuevo hospital.
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